03 septiembre 2014

Amor verdadero

La noche profesa un amor oscuro e incomparable como el día desde que te vi, 
con su velo ancestral repara cualquier mal 
y cura las heridas que dejamos hace tiempo atrás.

Jamás antes había visto algo sin igual,
un amor tan puro, mágico y real,
que con solo tocarte o mirarte, brillaba tal cual diamante.

Lo que daría por no dejarte,
por arriesgarme y amarte,
aunque en mis sueños todo sea fascinante.

Y es que sólo en mis sueños
pude besarte, sentirte con mi cuerpo,
sin ropa que nos interrumpiera.

Siempre has sido aquel que fuerzas me dio,
el único a quien de verdad le importé,
el único que hizo la diferencia en mi vida.

Te amo y siempre lo haré,
no hay nada en el mundo tan apreciable
como aquel abrazo que me regalaste.

Un abrazo que me ensordeció por completo,
me equilibró la mente, el cuerpo,
y finalmente, el corazón habló contento.