18 noviembre 2010

18/11/10

Yo que te extraño y te quiero a mi lado
los días se vuelven nublados
mi corazón frío e inundado
de estas lágrimas que mis ojos han llorado
solo por esperar tu afecto
de tantos sueños imperfectos
que solo contigo serían los más bellos.

He dicho tanto que me pregunto:
¿A caso pido demasiado?
Si tan sólo una caricia me hubieras dado
mi cuerpo habría temblado
mis pies habrían despegado
y mi mundo hubieras cambiado
de no ser por un defecto...

Irte y al miedo haberme entregado
con frialdad te dejé abandonado
en un cuarto me siento acorralado
desde que tu presencia está del otro lado
en un lugar del que mi cuerpo se ha alejado
y algún día poder reconocer tu encanto
que me dejó loco y enamorado.