Quizá esté perdido
o no haya encontrado mi camino.
A veces creo que no soy yo mismo...
Sin embargo me siento protegido,
sobretodo cuando estoy contigo,
aunque piense que no sientes lo mismo.
Pero verte aquí conmigo
es sentir que el cielo es divino,
claro e infinito como el propio destino.
Las estrellas brillan al unísono,
como nuestros latidos
que palpitan cada vez que respiro...
Es una sinfonía de amor que día a día repito,
la escucho y por las noches escribo
todo aquello que siento por ti, mi amigo.
Puede que no nos amemos,
pero de algo estoy seguro,
que tu y yo por siempre juntos estaremos.
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